Muchas veces me han hecho esta pregunta y yo, después de unos dos años de funcionamiento en los que no he conocido al paciente personalmente, ni siquiera en foto, puedo decir que funciona.
Es más, digo por mi propia experiencia que los resultados son más rápidos que en la consulta psicológica normal “en persona”.
También es muy importante lo bien que se “cuadran” los horarios para asistir a consulta, ya que puedes acceder a tu tratamiento de noche, en festivo, o en cualquier momento y por supuesto en cualquier sitio en que te encuentres siempre que dispongas de acceso a Internet.
Vas a recibir en tu correo tus ejercicios, bien explicados con imágenes diciéndote paso a paso qué debes corregir concretamente en tu caso personal para alcanzar tus objetivos y superar tus problemas psicológicos.
En las consultas presenciales (en otros tiempos era la única posibilidad que existía de tratamiento psicológico), todos los pacientes que lo conocen, la mayoría de veces la hora de sesión se están repitiendo una y otra vez las cosas que les han pasado y lo nuevo que les ha pasado últimamente, sintiéndose cada vez más desanimados al oírse ellos mismos relatar cómo es su vida y las cosas que les pasan.
En las consultas online se te va a pasar en principio un cuestionario, para ver qué es concretamente lo que sucede, pero con preguntas dirigidas, para ir al centro del problema con la ayuda del análisis de tu escritura y actuar en consecuencia corrigiendo los trazos necesarios.
Grafología y Grafoterapia
La grafología es el estudio de la escritura. Así podemos ver cómo es una persona en todos sus aspectos personales, en su actitud, carácter, en sus relaciones con los demás, cómo observa a los demás y a lo que le rodea, su forma de trabajar, cuál es su verdadera vocación independientemente de en que está trabajando, si está satisfecho de su vida, si se siente indefenso, y así un largo etcétera de datos a los que de otra manera no tenemos acceso ya que lo más que hacemos es ver a los demás hasta en sus más mínimos detalles, pero en el conocimiento de uno mismo es donde más fallamos, nos es muy difícil saber cómo somos aunque quien más nos debería conocer, tendríamos que ser nosotros mismos.
A veces nos dicen (por ejemplo en una entrevista de trabajo o en un circulo donde no nos conocen) “dinos un poco como eres, para conocerte” y ahí la mayoría divagamos y empezamos a sonreír un poco tímidos porque la verdad es que no sabemos ni por donde empezar.
Sin embargo, cuando empiezan a leer su análisis de personalidad, muchas personas comienzan a verse cómo son en realidad y normalmente todos aceptan cada cosa que leen, con pequeños matices que tan sólo son anecdóticos.
Si tu vida va bien con tus ideas sobre cómo te gusta que sea está bien así, tú eres el único que puede juzgar eso, la cuestión es cuando no te gusta como eres, y encima ves que tu vida siempre está con altibajos, unas veces bien, otras regular, y te ves metido como en un carrusel sin ver la manera de pararlo.
Aquí es donde entra la grafoterapia como una manera muy sencilla de solucionar sólo lo que te disgusta de ti, pero sin cambiar lo que sí te gusta.
Bien es verdad que no todo el mundo necesita hacerse un análisis grafológico de personalidad para conocerse, una persona puede elegir cambiar sólo algunas cosas, por ejemplo las que quiere quitar de su vida, las que más le molestan, y lo demás dejarlo tal y como está porque está satisfecho.
Aquí hay personas que no conocen la verdadera dimensión de la grafoterapia y se preguntan cómo puede ser que cambien su carácter o su personalidad por el simple hecho de escribir. Y la explicación es sencilla, la escritura puede hacer cambios en nuestra vida sencillamente porque escribimos con el cerebro no con la mano.
Así cuando hacemos grafoterapia (dirigidos por un profesional) le estamos dando a nuestro cerebro pequeñas órdenes en la dirección que queremos que vaya para modificar poco a poco la característica que queremos cambiar en nosotros.
Tan sólo nos va a requerir repetir los nuevos trazos de escritura todos los días hasta que los cambios se incorporen a nuestra escritura normal.
Preguntas Frecuentes Sobre Grafoterapia
- Mi letra me gusta, ¿cambiará si hago grafoterapia?
No, tu letra no va a cambiar, sólo que se la va a ver mejor hecha y más ordenada. Sólo cambian algunas partes de la letra o algunas formas concretas que hay que corregir.
- ¿Los resultados son rápidos?
Pues esto depende de ti, de cómo te lo tomes, de si haces los ejercicios, haces los controles quincenales, y en resumen de si te lo tomas en serio. De todas maneras lo que si le pido yo a todas las personas que hacen grafoterapia por primera vez es que al menos tienen que empezar con la “disposición de querer cambiar”, si quieres que todo siga igual no empieces.
- ¿Los resultados son duraderos o debo seguir haciendo grafoterapia siempre?
Los resultados una vez bien establecidos permanecen en nuestro cerebro ya que se quedan automatizados.
- ¿Y qué hay de la firma, deberé cambiar mi firma “de siempre”?
Pues yo en mis tratamientos como psicóloga y grafoterapeuta casi siempre empiezo por cambiar la firma; esto por supuesto sí es que es necesario, muchas veces los cambios son mínimos; de todas formas tu firma se seguirá pareciendo, solo le quitamos o ponemos algunos detalles pequeños, pero muy importantes. Por ejemplo, a veces sólo hay que situar la rúbrica en otro sitio (debajo de la firma), o poner tu nombre en la firma (hay personas que en su nombre sólo ponen la inicial), etc… detalles así.